Ay, Yo me llamo... 'desesperación'
Desesperadamente angustiado, desesperadamente hambriento de fama, pero qué pena por él que nadie le mete mente a su desesperación. Por ahí anda uno, más intenso que su mella "vístima", que piensa que porque participó en un megaproyecto, en donde lo tildaban de ridículo, tiene el derecho de llamarse "famoso". ¡No! Él ni era, ni es, ni tampoco será, porque nunca pegó. Dicen que anda sorteando cenas, firmas de autógrafos y hasta tiene un dizque "fans club", que lo promociona por todos lados y la gente Ni Fú, ni Fá con él. ¡Qué cena, ni qué cena, pfff!
Vuelve el perro arrepentido con el...
Oye, pero qué 'ta pasando ahí: son o no son. Unos famosos atléticos bien conocidos y eso decidieron terminar su relación para darle paso al "movimiento fantasmia'o". Dejen el invento que todo el mundo sabe que siguen siendo más que unos compañeritos pío, pío. Bien lo dice Samy y Sandra Sandoval en una canción, que el ratón se come el queso y que ella es "una baja pantalones". Bellos, decídanse y frenteen otra vez lo suyo. ¡Vivan!
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Ya su número jugó, su tiempo pasó
Dicen que una beldad está bien triste y eso, porque ya no suena ni truena, porque su tiempo pasó. Y como ya el pueblo se quitó la venda de los ojos, está pensando en quedarse en su tierrita y meterle amor a la campiña, porque ni para asesorar funciona. Ella se acostumbró a los lujos, se cree de plata la "Anita huerfanita". Ahí está tirando línea pa' saber cómo echarle gasolina al cuatro ruedas de aquí en adelante. No más plata fácil, vaya a vender verduras.
